Tuesday, August 15, 2006

This f*cking society

Pensando en qué escribir, se me ocurrió preguntarle a un amigo qué me aconsejaba. Pasamos por el tema del Karma (My Name is Earl) hasta llegar al buen tema de porqué los hombres son unos HP y las mujeres unas putas.

Ya aderezados con cierto blog que nos saca del aburrimiento, llegamos a una buena conversación (aunque fue más bien un monologo) de algo que nos aturde: Cuál es la obsesión por ser la super sexy, la super puta, el levantador? Mejor dicho, es como si hubiera una competencia de ser el mejor polvo.

Bueno, si uno lo piensa, la sociedad prácticamente lo lleva a la cultura todo-por-el-sexo. Si eres santa, eres una idiota. Si eres virgen, eres una pendeja. Si no ‘partes la papaya’, eres un marica. La lealtad vale tres tiras y amar es algo para los pendejos. Esta en todo y es imposible escapar de esto. Es como si la vida fuera otra edición más de Cosmopolitan.

Una vez me acerque a comprar una revista, de esas de pendejadas femeninas. Pues la única que no encontré con algún artículo para el super-polvo fue Buen Hogar. Un constante curso de Be-a-Bitch desde que tienes 14 años (siendo conservadores).

Esto me asquea un poco porque todo se va volviendo más superficial, más sin sentido. Hacer el amor es lo mismo que ‘follar’ (¿quién carajos dice ‘follar’ en Barranquilla?), un one-night-stand estando ebria es lo mismo que hacerlo con tu novio. En esa tónica, hasta masturbarse daría lo mismo, no?. Menos complicaciones. El orgasmo se volvió el fin único de la existencia, el santo grial de tu vida.

Cada cual vive su vida cómo quiere, pero a veces pienso que tanto hedonismo nos hace solo seres más confundidos. El sexo es importante pero no lo es todo, sino solo somos micos con cerebro más grande y a pesar de que todo mi pesimismo a veces me haga pensar que de hecho es así, me gusta pensar por momentos que nuestro cerebro es más grande por alguna razón. Y no estoy diciendo que debes saber la teoría de la relatividad o todo el protocolo TCP-IP. No es eso. Es buscar ser un 0.0000001% más trascendente.

Bueno, no sé si me entiendan… pero esa es la idea.

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